Pocas veces se tiene el privilegio tan grande de disfrutar de una historia contada de  una forma soberbia, muchas películas, libros, obras de teatro, etc. Han trascendido época, y esto pasa cuando la trama nos lleva más allá de las letras, más allá de las escenas, de la música o de los diálogos, te presentan un pequeño universo con un pasado que te apasiona descubrir, un presente que te emociona compartir, y con un deseo ferviente de saber a donde los personajes llegaran en su futuro, Bioshock Infinite es una de ellas.

Historia

“-Booker… ¿le temes a Dios?

– No… pero te temo a ti.”

Con estas palabras Bioshock Infinite nos da la bienvenida a su mundo, apenas comience la historia, posiblemente comenzarás a tener dudas sobre lo que está pasando,  Booker Dewitt es escoltado por dos enigmáticas personas hacia un faro desde el cual comenzará su misión, “Tráenos a la chica y salda tu deuda”, con estas palabras nuestro protagonista se dispone a aventurarse hacia Columbia la ciudad en el cielo.

Al principio es muy poco lo que sabrás, pero la trama se desarrolla con una fluidez  que muchos largometrajes envidiarían, conforme avances en la trama obtendrás respuestas, y te surgirán muchas preguntas, tendrás dilemas morales, y muy posiblemente analizarás tu propia vida, quizás llegarás a encariñarte con los personajes, los cuales tienen una química extraordinaria, y eso lo verás reflejado en ti mismo al interactuar con ellos, la historia tomará su punto álgido y te dará una conclusión que por sí sola justifica por completo decidirse por comenzar a jugarlo.

Controles

Como es de esperarse de un buen FPS, los controles responden muy bien, el único problema que tendrás para enfrentarte a tus enemigos en la innumerable cantidad de enfrentamientos que tendrás será con tu propia habilidad para lidiar con ellos, pero los controles nunca te fallarán o se sentirán flojos,  Bioshock Infinite no tiene nada que envidiarle a otros títulos del mismo género.

Gameplay

Como sus predecesores, este juego tiene formas de interactuar con el ambiente que aunque ya utilizadas en entregas anteriores de la saga, no dejan de ser interesantes y sobretodo entretenidas de manejar, en esta entrega cuentas con una fina selección de armamento, en todo momento podrás contar con dos armas, las cuales podrás intercambiar siempre que tengas a tu disposición un reemplazo, no te preocupes que esto será bastante común, ya que será bastante visto que al eliminar a alguno de tus enemigos este tendrá la gentileza de dejarse despojar de alguna pistola, rifle o similares que por obvias razones el ya no podrá utilizar.

Además, como era de esperarse, regresan las habilidades especiales, las cuales llegan bajo el nombre de Vigores, cabe mencionar que en esta entrega no se aprovecharon de la misma forma que en entregas anteriores, si bien hay muchas formas interesantes que en que puedes combinar y utilizar tus vigores, no puedes interactuar con el ambiente con ellos, de la misma forma que se lograba en el primer Bioshock, las mecánicas de los mismos, tienden a ser bastante similares aunque cambie el efecto principal, esto podrían considerarlo algunos un punto negativo, sin embargo no te aburrirás de intentar distintos combos a pesar de este detalle.

Aunque durante todo el juego debes  acompañar a Elizabeth esto no representa ningún problema, ya que los enemigos no le prestaran atención alguna, así que realmente no se tratará de escoltarla, pero podría ser que Elizabeth si lo sienta así, te ayuda tanto durante todo el juego, consiguiéndote municiones, sales o dinero, además de que sus poderes y habilidades son de una utilidad enorme durante la partida que más bien parecerá que ella te está escoltando a ti.

Lamentablemente el juego no tiene mucho valor de rejugabilidad, es únicamente una campaña y repetir la operación no te dará diferentes resultados, aun así la experiencia es muy satisfactoria, otro detalle a mencionar, es que tampoco cuenta con una modalidad multiplayer, si bien a muchos podria decepcionarles esto, el juego realmente no necesita de una, el tiempo de desarrollo que se hubiera ido en agregar una modalidad multiplayer únicamente por cumplir con un requisito posiblemente se hubiese notado en el producto final de la campaña principal, la cual esta muy bien lograda y pulida.

Gráficos

En el apartado gráfico, este juego tiene mucho de que presumir, si bien manejan un estilo más bien caricaturesco, es decir, los personajes no se ven estrictamente realistas, como sería en juegos como: The Last of Us, Resident Evil 6 u otros juegos que buscan un tono más bien formal, sin embargo esto es únicamente una decisión artística, ya que aquí, no sé extraña ninguno de esos aspectos.

Los ambientes están tan bien logrados que más que sentirte inmerso en la experiencia, uno podría incluso encontrarse con el deseo de estar en Columbia personalmente, con colores vivos una iluminación excelente, que combina bien dependiendo de la situación y del humor, y detalles dispuestos  por doquier para que sientas que Columbia es una ciudad vibrante y viva.

Las expresiones de los personajes es otro punto muy bien logrado en Bioshock Infinite,  Elizabeth quien te acompaña en todo momento, te regalará miradas muy acordes a la situación, y te hará realmente sentir su alegría, dolor o irá dependiendo de lo que suceda.

Música

Quizás este es el punto donde Bioshock Infinite brilla más fuerte, las melodías en este juego no son únicamente buenas, están excelentemente seleccionadas, si pones mucha atención a lo que sucede a tu alrededor te darás cuenta que la música va acorde con la situación, y no es solamente música de fondo,  el esfuerzo puesto en combinar el ámbito visual con el sonoro se nota y se aprecia, realmente la música pone el ambiente, en toda la extensión de la palabra.

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