- Por Gamelixir Team / noviembre 17, 2016
World of Final Fantasy es un RPG desarrollado por la famosa empresa Square Enix que llegó a las tiendas el pasado mes de octubre de este mismo año, el día 28 en Europa para ser más exactos, día que por cierto yo mismo fui a la tienda para comprarlo con mucha ilusión y muchas ganas de probar este nuevo título, y debo decir que me siento muy satisfecho por mis buenas expectativas y mi optimismo.
Como todos sabemos, este videojuego es una celebración o una especie de carta de amor a los fans de la franquicia «Final Fantasy» para volver un poco en el tiempo y encontrarnos con un sistema por turnos, una historia que a pesar de no ser original es correcta y con un universo bonito, caricaturesco y alegre donde encontraremos a muchos de los personajes que hemos conocido entrega tras entrega.
A título personal, debo decir que este juego me ha fascinado. Tenía mayores expectativas para este juego que para «Final Fantasy XV», y ahora que me lo he pasado, espero con más tranquilidad pero no por ello motivación este nuevo Final Fantasy numerado. Es claramente el título que los fans de la franquicia merece, y espero de corazón que el XV sea capaz de estar también a la altura, sobretodo si tenemos en cuenta qué sucedió con «Final Fantasy XIII».
Empecemos hablando de la historia: World of Final Fantasy carece de originalidad en cuanto a argumento, pero no por ello es aburrido; es decir, propone algo que no es para nada innovador pero que es fácil de tragar. Nos presenta dos personajes, Reynn y Lann, a quienes se les coge cariño con mucha facilidad. Una criatura tierna similar a un zorro azul y blanco aparece un día cualquiera y las cosas cambian para ambos, viéndose envueltos en una gran misión que los lleva a viajar a través del portal que lleva a Grymoire. Los dos personajes descubren que gracias a los tatuajes en sus brazos, pueden domesticar a las criaturas pertenecientes a este mundo y usarlas para llevar a cabo su misión, y además, también son capaces de cambiar de tamaño y elegir entre su forma mundana o la forma acorde con Grymoire, que es una mucho más pequeña.
El juego, en cuanto a estética, es similar (y con creces) a Kingdom Hearts. Creo que cualquier fan de este maravilloso spin-off que es ya una saga con todas las letras se puede dar cuenta de esto fácilmente, y al avanzar en el juego y ver el desarrollo de la historia, también es fácil rendirse a la evidencia de que el juego se le quiere parecer al tomar carrerilla a partir de la segunda mitad, donde las cosas se complican y se ponen más interesantes.
Un punto muy positivo que le veo al juego es el peso que tienen los personajes de Final Fantasy en esta entrega. A diferencia de Kingdom Hearts, donde en su mayoría son una especie de cameo que no terminan de importar, World of Final Fantasy los introduce de manera contundente y les ofrece a cada uno importancia, la suficiente como para brillar tanto como los dos personajes principales.
Además, tenemos invocaciones de Final Fantasy y criaturas que podemos capturar llamadas «mirages», entre otros Shiva e Ifrit. El diseño de todos ellos está realizado con mucho cariño, de manera coqueta y elegante, y claramente subraya la importancia del título: no intenta ser un RPG convencional en el sentido de la profundidad de su historia, sino que quiere llamar tanto a los viejos fans como a un público más joven y nuevo en el sector de los videojuegos.
El sistema de habilidades y de subida de nivel es muy similar a la de Final Fantasy X, un punto que a mí particularmente me ha gustado mucho, puesto que es de lejos mi entrega preferida de la saga. Además, el sistema de combate nos permite dos opciones distintas: por turnos (es decir, que nada se mueve hasta que tú te muevas) o activo, que todo se desenvuelve solo sin tener en cuenta tus acciones. Es difícil no reconocer que el juego hace todo lo posible porque sea una vuelta al pasado, a los antiguos Final Fantasy y a lo que Square Soft nos tenía acostumbrados.
Me gustaría matizar un último punto: el videojuego no se esfuerza por suponer un reto como por ejemplo lo suponía «Final Fantasy VIII», donde tu personaje subía de nivel junto a tus enemigos; es decir, si eras nivel 30, tenías siempre enemigos equilibrados, y era constantemente un desafío. Este World of Final Fantasy empieza muy flojo, sin embargo, y poco a poco va cogiendo dificultad. No penséis que todo el juego es simple, porque no es para nada el caso. Solamente el principio lo es.
Creo sinceramente que World of Final Fantasy es de los mejores spin-off que Final Fantasy ha tenido jamás, sino el mejor, y que merece completamente la pena comprarlo. Me he divertido mucho pasándolo, disfrutando tanto de los personajes de este universo como de los originales de Final Fantasy, y de la estética alegre y bonita que ofrece para tratar de derretirnos y de llegar a nuestros recuerdos.